El yoga en la escuela

Practicar yoga supone ganar bienestar físico, mental y emocional. El yoga IYENGAR® es adecuado para cualquier persona, sea cual sea su edad y constitución.
Durante la clase de yoga se practican diferentes ásanas de forma fluida y ágil, para mantener la atención y la concentración de los más pequeños. Las posturas seleccionadas estimulan su imaginación y ayudan en el desarrollo de la psicomotricidad fina y gruesa. También refuerzan el sistema muscular, mejoran la postura del cuerpo y fomentan la autoconfianza. Y, por otra parte, mejoran la concentración y la fortaleza psíquica y, lo que es más interesante para los niños, suponen un reto de lo más divertido.

Que aporta el yoga a la escuela
La clase de yoga se convierte en un rato divertido destinado a mover el cuerpo y liberar tensiones, a la vez que se desarrolla la fuerza, la agilidad y el equilibrio. Mejora, pues, la conciencia corporal y la estabilidad emocional, además de la autoestima, y se fomenta la curiosidad y el respeto hacia las demás personas.